LA VOZ DE GOICOECHEA (Por Isidro Ros).- Para tener una buena conexión a Internet debemos elegir bien a nuestro proveedor, tenemos que elegir una conexión que sea lo bastante rápida como para cubrir nuestra sola necesidades, y también debemos evitar cometer algunos errores que pueden acabar teniendo un serio impacto no solo en el rendimiento de la misma, sino también en su seguridad.
En este artículo voy a compartir con vosotros cuatro de esos errores que son de los más frecuentes, y también de los más graves por las serias consecuencias que pueden tener en nuestra conexión. También os explicaré cómo podemos evitarlos, y añadiré otra información importante en caso de que resulte útil. Si tenéis alguna duda podéis dejarla en los comentarios.
En este artículo voy a compartir con vosotros cuatro de esos errores que son de los más frecuentes, y también de los más graves por las serias consecuencias que pueden tener en nuestra conexión. También os explicaré cómo podemos evitarlos, y añadiré otra información importante en caso de que resulte útil. Si tenéis alguna duda podéis dejarla en los comentarios.
1.- Una buena conexión a Internet no es posible sin una buena contraseña
Utilizar una contraseña poco segura será como dejar abierta nuestra conexión a posibles intrusos. También es una mala idea mantener la contraseña que viene por defecto con el router, ya que esta puede que acabe siendo filtrada y que deje de ser segura.
Tener un intruso en tu red Wi-Fi no es nada agradable, puedo dar fe de ello, ya que tuve uno hace ya muchos años. Esto puede arruinar por completo tu conexión a Internet tanto inalámbrica como cableada, porque dicho intruso podría consumir todo el ancho de banda disponible y dejarte sin Internet.
Utiliza una contraseña que no puedan asociar contigo, y que no represente ningún nombre de personas cercanas a ti o de cosas que tengas, algo sin sentido con números, letras, mayúsculas y minúsculas y con al menos un par de caracteres especiales.
2.- Mala colocación del router, el origen de muchos quebraderos de cabeza
Si colocas el router en una zona muy baja la señal Wi-Fi perderá alcance, y lo mismo sucederá si este está ubicado en una zona donde hay muchos obstáculos a su alrededor, o si encuentra muchas fuentes de interferencia.
Una mala ubicación del router puede hacer que no tengamos conexión a Internet incluso a poca distancia, o que esta sea de una calidad muy baja y que ofrezca un rendimiento muy limitado. Para solucionarlo, solo tenemos que colocar el router en un lugar elevado y libre de obstáculos, no hay más.
3.- Conectarnos a la red Wi-Fi menos apropiada
Un router puede tener diferentes bandas compatibles con nuestros dispositivos. Nosotros seremos los que tendremos que elegir a qué banda queremos conectarnos, y es una decisión muy importante, porque esto determinará el alcance y la velocidad de nuestra conexión.
Por ejemplo, si tenemos un router compatible con la banda de 6 GHz y también con las bandas de 5 GHz y 2,4 GHz debemos conectarnos a la primera siempre que sea posible, porque esta ofrece un mayor ancho de banda y además está menos saturada que las otras dos.
Si nos conectamos a la banda de 2,4 GHz tendremos un ancho de banda mucho más bajo, ya demás estaremos utilizando una banda que está muy saturada y que es más propensa a sufrir interferencias.
4.- No actualizar nunca el router
Este es un error cada vez más frecuente porque este tipo de actualizaciones se están volviendo cada vez más importantes. Las actualizaciones que recibe un router no son tan frecuentes como las que puede recibir un PC o un smartphone, pero suelen contener mejoras importantes que afectan principalmente a la seguridad.
Algunos routers, como la serie FRTIZ!Box de AVM, reciben actualizaciones que además de mejorar la seguridad también introducen mejoras de rendimiento y nuevas funciones y características. FRITZ!OS 8 es uno de los mejores ejemplos recientes. Instalar las actualizaciones disponibles para tu router siempre es una buena idea, porque te ayudará a tener una buena conexión a Internet.
Utilizar una contraseña poco segura será como dejar abierta nuestra conexión a posibles intrusos. También es una mala idea mantener la contraseña que viene por defecto con el router, ya que esta puede que acabe siendo filtrada y que deje de ser segura.
Tener un intruso en tu red Wi-Fi no es nada agradable, puedo dar fe de ello, ya que tuve uno hace ya muchos años. Esto puede arruinar por completo tu conexión a Internet tanto inalámbrica como cableada, porque dicho intruso podría consumir todo el ancho de banda disponible y dejarte sin Internet.
Utiliza una contraseña que no puedan asociar contigo, y que no represente ningún nombre de personas cercanas a ti o de cosas que tengas, algo sin sentido con números, letras, mayúsculas y minúsculas y con al menos un par de caracteres especiales.
2.- Mala colocación del router, el origen de muchos quebraderos de cabeza
Si colocas el router en una zona muy baja la señal Wi-Fi perderá alcance, y lo mismo sucederá si este está ubicado en una zona donde hay muchos obstáculos a su alrededor, o si encuentra muchas fuentes de interferencia.
Una mala ubicación del router puede hacer que no tengamos conexión a Internet incluso a poca distancia, o que esta sea de una calidad muy baja y que ofrezca un rendimiento muy limitado. Para solucionarlo, solo tenemos que colocar el router en un lugar elevado y libre de obstáculos, no hay más.
3.- Conectarnos a la red Wi-Fi menos apropiada
Un router puede tener diferentes bandas compatibles con nuestros dispositivos. Nosotros seremos los que tendremos que elegir a qué banda queremos conectarnos, y es una decisión muy importante, porque esto determinará el alcance y la velocidad de nuestra conexión.
Por ejemplo, si tenemos un router compatible con la banda de 6 GHz y también con las bandas de 5 GHz y 2,4 GHz debemos conectarnos a la primera siempre que sea posible, porque esta ofrece un mayor ancho de banda y además está menos saturada que las otras dos.
Si nos conectamos a la banda de 2,4 GHz tendremos un ancho de banda mucho más bajo, ya demás estaremos utilizando una banda que está muy saturada y que es más propensa a sufrir interferencias.
4.- No actualizar nunca el router
Este es un error cada vez más frecuente porque este tipo de actualizaciones se están volviendo cada vez más importantes. Las actualizaciones que recibe un router no son tan frecuentes como las que puede recibir un PC o un smartphone, pero suelen contener mejoras importantes que afectan principalmente a la seguridad.
Algunos routers, como la serie FRTIZ!Box de AVM, reciben actualizaciones que además de mejorar la seguridad también introducen mejoras de rendimiento y nuevas funciones y características. FRITZ!OS 8 es uno de los mejores ejemplos recientes. Instalar las actualizaciones disponibles para tu router siempre es una buena idea, porque te ayudará a tener una buena conexión a Internet.
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