Son distintas las corrientes que proponen estas prácticas y que las han cultivado durante siglos. La medicina tradicional china, la acupuntura y la reflexología tienen, cada una a su manera, una aproximación a los automasajes.
Los automasajes no solo se emplean para descansar mejor. Algunas investigaciones han relacionado el efecto del masaje que un paciente se practica a sí mismo con una mejoría de los dolores articulares y hasta con la suspensión del hábito de fumar.
En concreto, no existen evidencias científicas contundentes que respalden a los masajes auto proporcionados como métodos efectivos para combatir el insomnio. Sin embargo, sí es cierto que promover la relajación muscular y satisfacer el bienestar personal, acarreará un estado de relajación que podría propender al sueño.
Entonces, algunos encontrarán en estos masajes una vía oportuna para descansar. Y, por otro lado, habrá en quienes no surtirán efecto.
La propuesta, si sufres insomnio, es hacer la prueba. Los efectos adversos son casi inexistentes, pero los resultados podrían sorprenderte.
6 opciones para que pruebes los automasajes para descansar
Un automasaje es de fácil administración y no tiene costo. La persona solo debe aprender los mínimos de la técnica y la posibilidad de una reacción indeseada es ínfima. Si tienes dudas, puedes consultar con un profesional para que te oriente sobre los detalles precisos de cada técnica.
1. Masajes en los pies
En primer lugar, nos referiremos al masaje en los pies. La mayoría de estas técnicas para automasaje provienen de la reflexología podal. Lo que nosotros podemos hacer es estimular la planta de los pies, el empeine y los tobillos, justo antes de acostarnos.
Este tipo de automasaje podría reducir el cansancio y el dolor que a veces se asienta en las extremidades inferiores. Por ende, tras una jornada que nos tuvo parados mucho tiempo o caminando varios kilómetros, sería un momento relajante para disfrutar.
2. En el abdomen
El abdomen es otra parte del cuerpo que traduce tensiones y estrés. Aunque casi siempre se asocie el nerviosismo con el movimiento intestinal, no deberíamos descartar la contractura que se puede acumular en los músculos abdominales.
Masajear con suavidad el vientre puede ayudar a relajarnos y a conciliar mejor el sueño. Se recomienda seguir siempre el recorrido del intestino grueso, es decir:
- Empezar en la ingle derecha.
- Subir hacia las costillas del lado derecho.
- Seguir en círculo hacia las costillas del lado izquierdo.
- Bajar hasta la ingle izquierda.
Otro de los automasajes para descansar mejor que podemos hacernos cada día, durante unos minutos, es el de círculos en el pecho. Es interesante hacerlos siempre con la mano ejerciendo algo de presión sobre la piel, de modo que la misma se deslice por sobre las costillas y el esternón.
Seguir el ritmo de la respiración mientras nos practicamos el masaje puede contribuir a una mayor relajación. Por ejemplo, podemos subir con la mano por el lado derecho del tórax mientras inspiramos, y luego bajamos por el lado izquierdo mientras exhalamos. Siempre con lentitud.
Esta parte del cuerpo acumula mucha tensión cuando atravesamos situaciones de estrés. No solo nos referimos a los trapecios en sí, sino también a las cervicales y, en general, a los músculos dorsales.
La aplicación de un masaje de presión moderada y de corta duración, tratando de alcanzar partes de la espalda que nos sean accesibles, reduce la tensión en la zona. Aunque lo ideal sería que nos lo realizara otra persona, mientras estamos sentados, la idea de los automasajes es proveernos de sus beneficios cuando no podemos recurrir a alguien más.
Un plan sugerido es apretar un poco el trapecio con la mano opuesta, mientras hacemos círculos con el hombro para mover el músculo. Es probable que haya algo de molestia al inicio o que duela, pero después aparecerá un gran alivio.
5. En la cara
Uno de los automasajes más fáciles de realizar y que más nos va a relajar, es el del rostro. Aunque no lo notemos, los músculos faciales acumulan una gran tensión durante el día. Esta técnica también proviene de la reflexología y busca estimular diferentes puntos de la anatomía de la cara.
Algunos movimientos sugeridos son los siguientes:
- Masajear la frente en sentido horizontal.
- Pellizcar con suavidad el entrecejo y las cejas.
- Hacer círculos de intensidad media en la línea de debajo de los pómulos, desde la nariz hasta las orejas.
Por último, la cabeza es ideal para los automasajes relajantes. Si dispones de tiempo durante la noche, dedicar 15 minutos al cuero cabelludo puede significar una gran diferencia al momento del descanso.
Estimular ciertos puntos en la región de la cabeza podría tener efectos sobre el sistema nervioso, en particular, en su parte autónoma. Por lo tanto, ayudaría a mejorar la circulación de sangre desde el cuello hacia arriba, así como reducir la presión arterial.
Haz la prueba
Ahora ya conoces algunas opciones de automasajes para descansar mejor y combatir el insomnio. Vale aclararlo de nuevo: podrían no causarte ningún efecto a ti, en concreto, pero no pierdes nada con intentarlo.
Unos pocos minutos cada noche podrían traerte relajación, bienestar y liberación del estrés. Si logras esos objetivos, la probabilidad de mejorar la calidad del sueño es alta. ¿Quién podría rechazar el hábito de consentirse cada noche?
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