LA VOZ DE GOICOECHEA (Por Francisco García).- El queso es uno de los alimentos más ricos. No obstante, no todas las personas pueden disfrutarlo. Tanto aquellos que tienen intolerancia a la lactosa como aquellos que han adoptado por una alimentación vegana, lo excluyen de su alimentación.
La buena noticia es que existen formas de evitar la lactosa o los productos de origen animal. Ciertamente, existen muchas opciones para preparar queso vegano. Vale la pena recordar que siempre hay alternativas y que está en nosotros ir a por ellas. Las limitaciones, en muchas ocasiones, nos ayudan a desatar nuestra creatividad.
Para preparar queso vegano se utilizan exclusivamente productos vegetales. A diferencia de lo que ocurre con el queso tradicional, que es elaborado a partir de caseína, un tipo de proteína de la leche de vacas, ovejas o cabras.
Los quesos vegetales contienen mucho menos colesterol, grasa y carbohidratos que los quesos elaborados con leche. Además, son bajos en sodio y azúcares, y constituyen un buen aporte de proteínas.
El queso vegano satisface las necesidades nutricionales de aquellas personas que padecen de intolerancia o alergia a la lactosa. También de quienes por elección propia han optado por un estilo de vida sin productos lácteos; este es el caso de los veganos y algunos vegetarianos.
Además de lo anterior, estas elaboraciones son ideales para quienes deben mantener una dieta baja en grasa animal; aunque sea solo por llevar una alimentación más saludable o bien, tener un consumo de productos animales más considerado.
Si bien en el mercado existen algunos quesos veganos ya preparados, es mejor prepararlos en casa para que sean más naturales. Para ello se puede utilizar una gran variedad de ingredientes, adaptados a todos los gustos y bolsillos. A continuación, veremos algunas ideas de cómo preparar queso vegano.
1. Queso vegano de garbanzos
Este queso es muy fácil de preparar en casa y se puede incluir en ensaladas, sándwiches o comerlo simplemente con una rebanada de pan. Se trata de una opción muy recomendable para todos los paladares.
Ingredientes:
- 1 L de agua.
- Sal (al gusto).
- Paprika (al gusto).
- Ajo en polvo (5 g).
- Aceite de oliva (al gusto).
- 2 tazas de garbanzos cocidos (400 g).
- 6 cucharadas de levadura nutricional (70 g).
A continuación escurrir el agua de remojo, añadir un litro de agua fría y mezclar con una batidora eléctrica.
Pasar la preparación por un colador muy fino y ponerla en una olla a fuego medio, revolviendo constantemente hasta que espese.
Cuando empiece a hervir, añadir la levadura, una cucharada de aceite de oliva y condimentar con sal, ajo en polvo y paprika al gusto.
Continuar revolviendo luego hasta que la preparación tenga una consistencia cremosa.
Untar un molde con aceite de oliva y verter posteriormente la preparación.
Dejar en el refrigerador por lo menos una hora antes de desmoldar.
2. Queso vegano de almendras
Preparar queso vegano de almendras en casa es muy sencillo.
Ingredientes
- 2 tazas de almendras peladas (300 g).
- 6 cucharadas de aceite de oliva (70 mL).
- 4 cucharadas de zumo de limón (50 mL).
- 1 taza de agua (240 mL).
- Romero seco (al gusto).
- Ajo en polvo (5 g).
- Sal (al gusto).
Escurrir después el agua de remojo y triturar las almendras en un procesador de alimentos (o licuadora) junto con el zumo de limón, el agua, el aceite de oliva y los aliños.
A continuación dejar escurrir esta mezcla en un paño de cocina fino y limpio en el refrigerador durante toda la noche.
Colocar la preparación en un molde ligeramente engrasado y hornear a temperatura baja (100º C) durante aproximadamente 50 minutos.
Dejar enfriar y desmoldar.
3. Queso vegano de patata y zanahoria
Los ingredientes que se necesitan para preparar este queso vegano son muy fáciles de encontrar y también son muy económicos. Así, e s una receta sencilla y deliciosa, ideal para el desayuno, la merienda o para tomar snacks entre horas.
- 2 tazas de patatas peladas y en dados (400 g).
- 1 taza de zanahorias peladas y en cubos (200 g).
- 5 cucharadas de aceite de oliva (70 mL).
- 2 cucharadas de zumo de limón (30 mL).
- 1/2 taza de levadura de cerveza (100 g).
- 1/2 taza de agua (120 mL).
- Sal y paprika (al gusto).
- Ajo en polvo (5 g).
Escurrir luego el agua de cocción. Reservar media taza de esta agua.
A continuación, procesar o licuar las verduras con el agua reservada y el resto de ingredientes, hasta obtener una textura cremosa.
Por último, dejar en el refrigerador hasta que esté frío. Esta receta nos aporta muchos nutrientes, con muy poco porcentaje graso, ideal para dietas de adelgazamiento.
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