LA VOZ DE GOICOECHEA (Por Jonatan Menguez).- La artista que conquistó al mundo con su voz y sus bailes falleció a los 83 años. Durante décadas, luchó contra varias enfermedades y, en 2017, se había sometido a un trasplante de riñón.
El 24 de mayo de 2023 se anunció el fallecimiento de la cantante Tina Turner. Si bien no se revelaron las causas específicas del deceso, el comunicado de su familia asegura que «se fue en paz después de una larga enfermedad». Turner luchó contra varios problemas de salud durante su vida, entre los que se encuentran la hipertensión, la insuficiencia renal y el cáncer de colon.
La partida de Tina Turner a los 83 años
A través de un comunicado, la familia de Tina Turner hizo público su fallecimiento en la jornada del 24 de mayo. La «Reina del Rock and Roll» partió a los 83 años en su casa de Küsnacht, norte de Suiza, país del que adoptó nacionalidad en 2013. A pesar de que no se revelaron los detalles del deceso, se sabe que la cantante padecía un complejo historial de lucha contra varias enfermedades.
En 1978, Turner fue diagnosticada con presión arterial alta, condición que no fue tratada de manera correcta, como reveló ella misma décadas más tarde. Según un estudio de la revista científica Journal of the American Medical Association, esta «enfermedad silenciosa» afecta a unos 116 millones de personas adultas en los Estados Unidos. Mientras que esa cifra asciende a más de 1000 millones en todo el mundo.
La misma publicación sugiere que la hipertensión se asocia con un mayor riesgo de eventos de enfermedad cardiovascular. Por ejemplo, insuficiencia cardíaca y accidente cerebrovascular. Por su parte, un artículo de la revista Nature Reviews explica que menos de la mitad de las personas que padecen hipertensión son conscientes de su condición. Otras, a pesar de saberlo, no reciben el tratamiento adecuado, a pesar de que el mismo puede reducir la carga global de la enfermedad y la mortalidad.
¿Qué problemas de salud tuvo que enfrentar?
Hacia finales de la década de 1970, Tina ya era una estrella internacional. El éxito se debía a sus éxitos junto a la banda que integró con Ike Turner, su primer esposo, y a sus primeros trabajos solistas. Fue en ese momento cuando le diagnosticaron presión arterial alta. Durante entrevistas posteriores, aseguró no haber recibido la información necesaria sobre su gravedad.
A pesar de esto, le recetaron medicamentos, los cuales prefirió no consumir, creyendo que era una «condición normal» y que no precisaba control. Su salud empeoró de forma drástica en 2009, cuando sufrió un derrame cerebral y reveló públicamente que sus riñones habían perdido el 35 % de su función. El cuadro se repitió 4 años después, y fue entonces cuando la cantante requirió comenzar un proceso de diálisis para tratar la insuficiencia renal.
Según un estudio de la Revista Panamericana de Salud Pública, más personas mueren anualmente por enfermedades cardiovasculares (ECV) que por cualquier otra causa. La misma publicación indica que, en 2012, se estimaba que 17,5 millones de personas murieron a causa de enfermedades cardiovasculares. Además, para 2030 se prevé que las ECV causen 22 millones de muertes al año.
El trasplante que le salvó la vida
En 2016, Tina Turner fue diagnosticada de cáncer de colon, condición cuya complejidad aumentaba aún más por la insuficiencia renal que padecía. Al año siguiente, Erwin Bach, su segundo esposo, se ofreció a donarle un riñón, ya que la función renal de sus órganos había caído hasta un 5 %.
El trasplante se ejecutó en 2017 y, a pesar de la compleja recuperación y la resistencia de su cuerpo a un agente desconocido, Tina pudo mejorar su estado. Para el año 2020, con la llegada de la pandemia mundial, la cantante aseguró que enfrentaba otro desafío de salud. No obstante, llevó a cabo los cuidados necesarios y aseguró sentirse saludable.
A través de un comunicado, la familia de Tina Turner hizo público su fallecimiento en la jornada del 24 de mayo. La «Reina del Rock and Roll» partió a los 83 años en su casa de Küsnacht, norte de Suiza, país del que adoptó nacionalidad en 2013. A pesar de que no se revelaron los detalles del deceso, se sabe que la cantante padecía un complejo historial de lucha contra varias enfermedades.
En 1978, Turner fue diagnosticada con presión arterial alta, condición que no fue tratada de manera correcta, como reveló ella misma décadas más tarde. Según un estudio de la revista científica Journal of the American Medical Association, esta «enfermedad silenciosa» afecta a unos 116 millones de personas adultas en los Estados Unidos. Mientras que esa cifra asciende a más de 1000 millones en todo el mundo.
La misma publicación sugiere que la hipertensión se asocia con un mayor riesgo de eventos de enfermedad cardiovascular. Por ejemplo, insuficiencia cardíaca y accidente cerebrovascular. Por su parte, un artículo de la revista Nature Reviews explica que menos de la mitad de las personas que padecen hipertensión son conscientes de su condición. Otras, a pesar de saberlo, no reciben el tratamiento adecuado, a pesar de que el mismo puede reducir la carga global de la enfermedad y la mortalidad.
¿Qué problemas de salud tuvo que enfrentar?
Hacia finales de la década de 1970, Tina ya era una estrella internacional. El éxito se debía a sus éxitos junto a la banda que integró con Ike Turner, su primer esposo, y a sus primeros trabajos solistas. Fue en ese momento cuando le diagnosticaron presión arterial alta. Durante entrevistas posteriores, aseguró no haber recibido la información necesaria sobre su gravedad.
A pesar de esto, le recetaron medicamentos, los cuales prefirió no consumir, creyendo que era una «condición normal» y que no precisaba control. Su salud empeoró de forma drástica en 2009, cuando sufrió un derrame cerebral y reveló públicamente que sus riñones habían perdido el 35 % de su función. El cuadro se repitió 4 años después, y fue entonces cuando la cantante requirió comenzar un proceso de diálisis para tratar la insuficiencia renal.
Según un estudio de la Revista Panamericana de Salud Pública, más personas mueren anualmente por enfermedades cardiovasculares (ECV) que por cualquier otra causa. La misma publicación indica que, en 2012, se estimaba que 17,5 millones de personas murieron a causa de enfermedades cardiovasculares. Además, para 2030 se prevé que las ECV causen 22 millones de muertes al año.
El trasplante que le salvó la vida
En 2016, Tina Turner fue diagnosticada de cáncer de colon, condición cuya complejidad aumentaba aún más por la insuficiencia renal que padecía. Al año siguiente, Erwin Bach, su segundo esposo, se ofreció a donarle un riñón, ya que la función renal de sus órganos había caído hasta un 5 %.
El trasplante se ejecutó en 2017 y, a pesar de la compleja recuperación y la resistencia de su cuerpo a un agente desconocido, Tina pudo mejorar su estado. Para el año 2020, con la llegada de la pandemia mundial, la cantante aseguró que enfrentaba otro desafío de salud. No obstante, llevó a cabo los cuidados necesarios y aseguró sentirse saludable.
Tomando consciencia
A mediados de marzo del corriente año, con motivo del Día Mundial del Riñón, Turner realizó una publicación en su Instagram para concientizar sobre las enfermedades renales. Aseguró que ella misma puso su vida en peligro cuando ignoró los graves síntomas y las consecuencias que traen estas afecciones.
Además, confesó que sus riñones fueron víctimas de no haber tratado la presión arterial con medicina convencional. Esta enfermedad no suele dar síntomas la mayor parte del tiempo, de ahí que los diagnósticos no se tomen con importancia en muchas ocasiones. Cuando se manifiesta en forma de urgencia o emergencia pueden aparecer los siguientes síntomas:
- Náuseas o vómitos.
- Sangrado de nariz.
- Fuertes dolores de cabeza.
- Sensación de confusión.
- Cambios en la visión.
El adiós a Tina Turner después de una valiente lucha contra los problemas de salud
A los 83 años, el mundo lamenta la partida física de una leyenda musical. Además de su legado artístico, su destreza escenográfica y sus icónicos estilos, Tina dejó un ejemplo de lucha contra enfermedades graves. La «Reina del Rock and Roll» se esforzó por concientizar, hasta último momento, sobre la importancia de tratar las afecciones renales que la aquejaron durante años.
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