La mejor palabra es la que no se dice, según va el dicho. Pero referente a la policía municipal, el dicho no calza bien. Hubo palabras que no pude decir por las que se me criticó. Vale expresarlas hoy con el fin de aclarar lo que mis críticos muy
mal entendieron de mí.
El 16 de diciembre afirmé en una nota publicada en el periódico "La Voz de Goicoechea impreso", como oficial de policía jubilado, veterano de las fuerzas armadas que
defendieron mi país de las incursiones sandinistas hace 40 años y
reciente exasesor municipal de seguridad, que la conformación del
cuerpo policial de Goicoechea no es la solución a la inseguridad
existente en nuestro cantón.
Dejé muy en claro que no se
tomó en cuenta a personas del cantón para dirigir y conformar esta
policía.
Añadí que su conformación, no obstante, cumple un
compromiso quizá político o hasta personal. Sin embargo, a fondo no
soluciona la inseguridad cantonal.
Se me acusó, como en la
fábula de Esopo, de no querer a las uvas colgadas porque estaban
acidas. Pero esa crítica sesgada desvía la atención de mi
verdadera motivación.
Critiqué a la Municipalidad a base de
mis principios y no por efecto personal
En esta época,
muchos se contentan con definir las cosas en términos de una función
ya existente, en vez de indagar en la naturaleza y el significado de
lo que algo realmente es. Les pregunto: ¿qué es la policía
municipal? ¿Qué es una verdadera policía cantonal?
Comencemos
con el siguiente principio básico: la dirección cantonal le
pertenece al residente del cantón. Y para que un mal escribano no le
eche luego la culpa a la pluma, déjenme declararlo de otra manera
más precisa. Existen varios residentes competentes del cantón que
por muchos años presentamos planes sobre cómo organizar una policía
cantonal sin alcanzar nada por ese esfuerzo constante.
Más
¿por qué lo hicimos?
Tenemos la convicción de que una
policía municipal verdadera es una agencia controlada LOCALMENTE y,
por lo tanto, descentralizada y no vinculada a otros cuerpos
policiales de otras ciudades o cantones, sino que carece de
federación o sindicato nacional. O sea, la policía de cantón,
propiamente, son los agentes LOCALES del orden del cantón en el que
viven y al que buscan servir.
Colaborará con otros cantones, pero ningún otro cantón la
define
Por lo tanto, si a los moradores de este cantón no se
les escucha sobre cómo desean conducir la vigilancia de sus propias
vidas y propiedades, entonces vale sospechar cuáles intereses
forasteros buscaron aprovechar el control del cantón mediante el
establecimiento final de una policía municipal.
Se sabe que
la policía no es un cuerpo militar, aunque tenga uniforme. Son
civiles en todos los sentidos de la palabra. ¿Pero se entiende
también que su autoridad es una autoridad civil y por ser local
deben ser los civiles DE LA LOCALIDAD, o sea los residentes locales
de los distritos del cantón, los que deben organizarla?
Dije
en mi primera crítica que los políticos de hoy en día de verdad
les importa un comino el cantón. Ahora añado que buscan agradar a
los que están afuera de su jurisdicción para proveer servicios a
los que estén dentro de su jurisdicción. Le quitan a Pedro para
pagarle a Juan. Pero la policía municipal cuenta con el apoyo de los
propietarios de locales, de cuya agencia son y mediante el impuesto a
la propiedad de los tales se financia. Todo el apoyo de la policía
municipal se origina a nivel local y son los residentes locales los
que deben mandar y no los forasteros del cantón, o sea la
Municipalidad de San José que vino a determinar cómo organizar a
nuestra policía cantonal.
Terminamos con que 20
efectivos para cubrir 130 mil habitantes
Y dado que la
policía municipal es preventiva y no represiva ¿dónde está el
plan de prevención para cada distrito? ¿Dónde está la voz de los
moradores del cantón? ¿Dónde quedó el esfuerzo de los residentes
que sabían qué tipo de organismo local deseaban formalizar como
vigilantes y protectores de sus propios vecinos?
Si la
orientación policial por la que los moradores del cantón pagan debe
ser local y por eso su tarea debe concentrarse en la protección de
la vida y la propiedad de SUS VECINOS, entonces es ESENCIAL que
cumpla con su responsabilidad de manera apolítica. Es decir, cuando
hay que defender a un vecino o que uno de ellos nos defienda de algún
mal es esencial no nos importe para qué partido vota. Y así hemos
de tratarnos entre vecinos. Por eso cada oficial de policía
municipal debe de ser, junto con su organismo, un verdadero vecino de
Goicoechea ordenado por goicoecheanos bajo planificación y
financiamiento goicoecheano y no josefino por conexiones
políticas.
Y de eso se trata el tema. La policía municipal
es un aspecto del gobierno propio de la ciudadanía local y de su
derecho a la legítima defensa propia. Los intentos forasteros de
sublevar a la policía municipal destruyen su carácter puramente
local y son, por tanto, ataques velados contra el derecho de la
legítima defensa propia, lo cual va enteramente en contra de la
razón principal por qué debíamos de formar un organismo policiaco
municipal.
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