Salmos 27: 1-3 “Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?
Cuando se juntaron contra mí los malignos, mis angustiadores y mis enemigos, Para comer mis carnes, ellos tropezaron y cayeron.
Aunque un ejército acampe contra mí, No temerá mi corazón; Aunque contra mí se levante guerra, Yo estaré confiado”
Alberto Cabezas: Director de Relaciones Internacionales para Centroamérica y México de la Asociación Internacional de Periodistas y Comunicadores Cristianos
Comentario
LA VOZ DE GOICOECHEA. - Uno de los principios y una de las enseñanzas más extraordinarias que hallamos en la Biblia, es el principio o el milagro de la providencia divina que te enseña que la vida esta regida no por la suerte, ni por la casualidad, sino por un Dios que desde el cielo mueve todo lo que tiene que mover, atreves de la soberanía y señorío.
Soberanía es Dios teniendo dominio y control, sobre circunstancias y situaciones, sobre cosas. Señorío es Dios teniendo control sobre personas, sobre individuos.
La providencia divina se nutre entonces en estas dos áreas en que Dios es soberano y en que Dios es Señor.
Cuando nosotros caminos bajo la providencia divina dice la Biblia en Romanos 8:28 “Y sabemos que para los que aman a Dios, todas las cosas cooperan para bien, esto es, para los que son llamados conforme a su propósito”.
Eso quiere decir, que Dios puede tornar lo negativo en positivo.
Dios puede darle vuelta a la tortilla.
Dios puede cambiar las circunstancias, porque Él está teniendo dominio. Él está teniendo control. No violando el libre albedrío, porque el final nosotros podemos decir “yo no quiero que Dios me bendiga, que Él me ayude”.
Es más, la Biblia en los Salmos dice que hay personas que reúsan la bendición, que no quieren la bendición. Tal vez a ti te parece absurdo u a lo loco pensar que alguien no quiere la bendición pues sí todo es posible en este mundo todo es posible.
Pero los que aman la bendición, los que quieren caminar de acuerdo a los principios de la Palabra de Dios, van a caminar bajo una sombrilla que se llama providencia divina.
Los que aman a Dios todas las cosas le ayudan a bien. No todo es voluntad de Dios, pero todo nos puede llevar a la voluntad de Dios.
La voluntad de Dios no es que estés enfermo, pero si estás enfermo te puede llevar a la voluntad de Dios que es que te sanes.
La voluntad de Dios no es que estés arruinado en tu trabajo, que tengas una crisis económica, esa no es la voluntad de Dios, pero esa situación te puede llevar a la voluntad de Dios.
La voluntad de Dios es esta escrita en un Salmo muy conocido verso 23” Jehová es mi pastor; nada me faltará”.
Entonces no todo es voluntad de Dios, pero todo nos puede llevar a voluntad de Dios a través de la providencia divina.
Jesús señoreando tomando control sobre personas, individuos. Él como soberano. Él tomando control sobre tus circunstancias, tus situaciones, sobre tus momentos de una o otra forma.
En resumen, debemos que tener nuestra confianza en Dios y no temer.
Escríbenos a nuestro correo electrónico
0 Comentarios
Queremos ver tus comentarios, estos nos enriquecen y ayudan a mejorar nuestras publicaciones :
_______________________________________________