Por Redacción
LA VOZ DE GOICOECHEA.- La presentación del manifiesto de tres legisladores del Partido Acción Ciudadana (PAC), encabezados por el diputado Welmer Ramos, quienes insisten en que las empresas de zona franca deben pagar impuestos, genera pérdida de credibilidad país, así como incertidumbre y desconfianza entre inversionistas a nivel internacional.
Carlos Wong, presidente de la Asociación de Zonas Francas de Costa Rica (AZOFRAS), asegura que la insistencia de estos diputados de gravar el Régimen de Zonas Francas, ahora con un impuesto sobre los dividendos, no sólo perjudicaría la generación de empleo, sino que está afectando la imagen de país como destino de inversiones con una propuesta que hoy no puede aplicarse técnicamente.
“Las empresas que se acogen a este régimen, arriesgando su capital, lo hacen bajo el entendido de que las normas jurídicas son claras, y que serán aplicadas y resguardas debidamente por el Estado. La seguridad jurídica y estabilidad de las condiciones otorgadas son elementos fundamentales para que las empresas decidan venir a Costa Rica a invertir, se mantengan en el país y continúen generando empleo”, indicó Wong.
Costa Rica no es el único país que busca atraer inversión extranjera. Está en competencia con otros países dentro y fuera de la región, tales como Panamá, Honduras, Colombia, Chile, Uruguay, Japón, Estados Unidos, entre otros, que en estos momentos están ofreciendo mejores condiciones fiscales y de clima de inversión. A nivel mundial, de acuerdo con el reporte de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), World Investment Report 2019, existen alrededor de 5.400 zonas francas a nivel global.
“En un contexto internacional retador y fuerte competencia por la atracción de inversión extranjera, si desnaturalizamos el concepto de zonas francas, las empresas fácilmente pueden decidir irse a otros países en vez de venir a Costa Rica”.
Wong lamenta que los diputados sigan insistiendo en imponer impuestos a un régimen que ha sido exitoso en los principales objetivos para lo que fue diseñado: la generación de empleo de calidad, formal e inclusivo, la generación de encadenamientos con proveedores nacionales, y las exportaciones de valor agregado de servicios y de bienes.
Las más de 380 empresas de zona franca generan más de 180 mil empleos entre directos e indirectos, y solo en el 2020, pese a la pandemia, han generado más de 15 mil nuevas fuentes de empleo.
Es un sistema que fue diseñado también para atraer capital que no está en Costa Rica, capital de empresas que están en el mundo, particularmente en países en desarrollo y en busca de otros países para generar operaciones, tanto en el Gran Área Metropolitana (GAM) como fuera de ella.
En los últimos 4 años, la generación de empleo fuera del GAM ha venido en un crecimiento promedio anual del 10%.
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