Sin embargo, hace poco ambas compañías rompieron sus acuerdos para fabricar coches urbanos debido a que PSA quería que los próximos 108 y C1 fueran 100% eléctricos, mientras que Toyota no contemplaba dejar de ofrecer el Aygo térmico en Europa. Por ello, la marca japonesa acordó quedarse con la parte de la empresa conjunta perteneciente a PSA y con la planta checa para el año 2021.
A pesar de todo, ambos gigantes mantendrán su fructuoso acuerdo para fabricar furgonetas (las Toyota Proace City y Proace son clones de las Peugeot Rifter-Partner/Citroën Berlingo/Opel Combo y de las Peugeot Traveller-Expert/Citroën SpaceTourer-Jumpy/Opel Zafira-Vivaro respectivamente), las cuales tendrán versiones eléctricas.
Sin embargo, parece que ahora Toyota podría haber cambiado de opinión, pues estaría sopesando crear un Aygo eléctrico para competir contra la oleada de modelos a baterías que llegarán a corto plazo al segmento A europeo (Dacia «City K-ZE», Renault Twingo Z.E, FIAT 500e, los «trillizos» de Volkswagen/SEAT/Skoda, la nueva gama Smart EQ, etc). De acuerdo con el director ejecutivo de Toyota Europa, Johan Van Zyl: «El Aygo ha sido un muy buen producto para nosotros en términos de conquista, pues nos ha permitido atraer a personas más jóvenes a nuestra marca. Todavía lo vemos como un buen segmento para nosotros«.
El Aygo es el único de Toyota de gran volumen (sin contar productos específicos como el todoterreno Land Cruiser, la pick-up Hilux, los deportivos GT86 y Supra, y su gama de furgonetas) en no disponer de una versión híbrida, que sí podemos encontrar en los Yaris, Corolla, C-HR, Camry, RAV4… Modelos que suponen la mayor parte de las ventas de Toyota en el viejo continente.
«Algunas ciudades están ampliando sus zonas cero emisiones, por lo que debemos pensar en el futuro y decir, ‘¿cómo podemos asegurarnos de tener una versión electrificada de un automóvil del segmento A que pueda utilizarse en estas ciudades?'» ¿Supondrá esto la supervivencia «in extremis» de la alianza con PSA para fabricar urbanos?
Por el momento, todo parece indicar que no, pues Van Zyl afirma que Toyota podrá utilizar la capacidad total de la fábrica de Kolin, que puede llegar a los 300.000 vehículos producidos anualmente. Además, PSA ahora cuenta con la marca Opel y está en negociaciones para fusionarse con FCA (FIAT-Chrysler, que es el indiscutible líder europeo del segmento A con los FIAT Panda y 500), por lo que sobre el papel no necesita a Toyota.
Fuente | Automotive News Europe
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