LA VOZ DE GOICOECHEA.- Una de las armas de fuego que utilizaron los delincuentes el pasado 4 de enero en un intento de asalto en Coronado fue robada a un agente del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Así lo confirmaron las autoridades de la entidad a través de la Oficina de Prensa, donde informaron que el arma fue robada en Batán de Limón y es de 9 milímetros, aunque no especificaron cómo fue robada.
Además, los sujetos utilizaron una segunda arma, calibre 38, que no tiene registros.
Todo ocurrió a eso del mediodía del jueves cuando un padre identificado como Carlos Quesada Ramírez y sus hijos Jesse Quesada, de 29 años y Daniel Quesada, de 21 años intentaron asaltar a una mujer, quien se dirigía a la sucursal del BAC en Coronado a depositar 30 millones de colones que llevaba en un bolso.
Uno de los sujetos amenazó a la mujer y el guarda de seguridad de la sucursal bancaria se percató de lo que ocurrió y forcejeó con los sujetos, a quienes disparó en repetidas ocasiones.
Carlos tenía antecedentes judiciales por amenazas en el 2010 y por venta de drogas en el 2011. Su hijo Jesse tenía antecedentes por portación de armas prohibidas en el 2009. Hasta el momento las autoridades no han recibido información confidencial sobre si estas personas estuvieran vinculados a otros hechos delictivos.
El OIJ informó que se está investigando el entorno familiar de los delincuentes, ya que en redes sociales circula una versión de que habría un vínculo laboral entre la madre de los fallecidos y la empresa a la que se le pretendían robarle los ¢30 millones que iba a ser depositados. De momento, solo se tienen a tres involucrados en el intento de asalto.
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