LA VOZ DE GOICOECHEA.- El presidente Carlos Alvarado Quesada logró sortear ayer sábado a quienes protestan contra su reforma fiscal, a la cual evitó hacer referencia en el discurso que pronunció durante un acto en el Museo Nacional de Costa Rica, con motivo del Día de la Independencia.
A última hora, el Gobierno de la República modificó la agenda oficial del mandatario, adelantando las actividades en al menos una hora y concentrándolas en la explanada interna del edificio y no en la Plaza de la Democracia. La maniobra repite el patrón de la ocurrida el viernes por la noche con la sesión del Consejo de Gobierno.
El gobernante pidió a la ciudadanía unidad y recordó que la independencia posibilita la libertad, en la cual cada persona puede decidir actuar o dejar de hacerlo.
Durante su exposición ante ministros, diputados, magistrados, cuerpo diplomático, estudiantes y público en general, Alvarado evitó hacer referencia a las protestas que tomaron las calles desde el pasado lunes, con motivo de una huelga indefinida convocada por las organizaciones sindicales, que se oponen al proyecto de Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas.
La tradicional entrega de la ofrenda en el Monumento Nacional antecedió el acto en el museo.
Una vez culminado el acto, el presidente se dirigió a la Avenida Segunda, donde caminó hasta la Plaza de la Democracia para dirigir un mensaje a la banda de la escuela Marcelino García, que lideraba los desfiles del 15 de setiembre en San José.
Posteriormente se retiró con resguardo policial, a escasos 400 metros de una concentración de manifestantes en la Plaza de las Garantías Sociales.
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