LA VOZ DE GOICOECHEA.- El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) reporta un aumento en el uso de drogas inhalantes entre los menores de edad costarricenses.
Así lo maneja la sección de Penal Juvenil de la entidad que detectó un mayor número de casos entre los adolescentes que usan cemento y pegamentos para drogarse.
Según el OIJ, este uso de inhalantes se une junto a la venta y consumo de marihuana como la principal preocupación de la policía judicial en las casas de enseñanza.
El funcionario señaló que el uso de cemento se había dejado de lado hace mucho tiempo, pero en las últimas se ha detectado un nuevo auge.
Además de estas drogas, en las intervenciones realizadas a colegios se ha encontrado alcohol, crack y drogas sintéticas.
Las autoridades han identificado un grupo de menores de 13 y 14 años que no solo son consumidores si no que ya son vendedores de sustancias ilícitas.
“Cada día hay más muchachos que empiezan con el consumo de estas sustancias. Se detiene a quienes lo venden. El morbo, la razón es porque esto les da empoderamiento. Se sienten protegidos y el aspecto económico juega porque pueden comprarse lo que quieran”, aseguró Randall Bonilla, jefe de la sección de Penal Juvenil.
Las autoridades consideran que una de las principales acciones por mejorar son las barreras perimetrales de los centro educativos. Esto ya que la mayoría son de mallas abiertas con hay terrenos aislados que benefician a los vendedores de drogas.
Solo la Oficina de San José mantiene 50 investigaciones contra menores que venden drogas dentro de colegios josefinos.
Los especialistas hacen un llamado ante los altos riesgos de inhalar químicos industriales como cementos y pegamentos ya que provocan daños al cerebro. Además podrían generar problemas cardiacos y malestares respiratorios.
Consumo desde niños
Las autoridades nacionales ven con preocupación este tema, en especial por la edad de inicio de los costarricenses en la inhalación de este tipo de drogas.
Una investigación del Instituto Costarricense sobre Drogas (ICD) analizó la relación entre privados de libertad y el consumo de drogas. Allí se detalló que el promedio de edad de inicio en el consumo de inhalantes es a los 15 años. No obstante, en el análisis estadístico se contabilizaron casos en los que arrancaron con apenas 6 años.
El estudio denominado “Consumo de drogas y relación droga/delito en el Sistema Penitenciario Nacional para hombres adultos en condición de sentenciados” entrevistó a más de 700 privados de libertad.
Además de los inhalantes, el informe documentó que a la edad de 6 años varios entrevistaron declararon haber iniciado con el consumo de drogas como crack y la marihuana. Por su parte la edad de inicio de la cocaína fue de 8 años.
El director del ICD, Guillermo Araya explicó que los menores componen el principal público meta de los vendedores de drogas, ya que buscan ganar consumidores en una etapa de exploración normal.
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