LA VOZ DE GOICOECHEA.- La carga costarricense que sale vía terrestre con destino al norte de Centroamérica y México cambió de ruta desde que los tranques tomaron fuerza en Nicaragua, según representantes del sector transporte y comercio de ese país, lo que ha generado pérdidas económicas y tiempo.
La directora ejecutiva de la Asociación de Carga Costarricense de Transportistas Unitarios, Marjorie Lizano dijo que los dueños de los cargamentos han optado por hacer los envíos vía marítima para cumplir con los contratados ya establecidos, pero que eso conlleva otra dinámica de trabajo, que no estaba prevista.
“No tenemos los costos cuantificados, pero más que un costo económico, es (una pérdida) de tiempo, el servicio vía terrestre es mucho más ágil que el marítimo, por un tema de colocación, por el manejo de puertos, vapores , esa logística (en las embarcaciones), es un poco más compleja. Por eso se opta al servicio terrestre que es más ágil que el naviero”, explicó Lizano.
Además mencionó que Nicaragua es el corredor más importante para Costa Rica para los envíos vía terrestre, ejemplificando que una carga hacia Guatemala llega en dos días y medios promedio, mientras que por vía marítima el tiempo de llegada va a estar determinada por la conexión establecidas en los puertos.
“Desde el momento que no hay tráfico fluido hay afectaciones en los envíos”, señaló Lizano.
Yolanda Fernández Ochoa, presidenta Cámara de Comercio de Costa Rica secunda la posición de Lizano, afirmando que la mayor afectación para el comercio tico fue la suspensión de transporte para el envío de bienes a Nicaragua.
“Las empresas experimentaron dificultades y retrasos para entregar las mercaderías, aunado a que en muchos casos optaron por fortalecer las medidas de seguridad”, resaltó Ochoa.
Las fuentes citadas apuntan que Nicaragua es el cuarto socio comercial de mayor importancia para Costa Rica, cuyas exportaciones superan los 500 millones de dólares anuales, incentivados por la demanda de productos de preparación alimenticia.
La Cámara de Comercio de Costa Rica, estima que en 2017 en el paso de Peñas Blancas transitaron más de 81 mil contenedores entre importaciones y exportaciones incluídos los de tránsitos internacionales.
Empresas de capital costarricense saqueados
Ochoa afirmó que en la actualidad principal problema que enfrentan cadenas de comercio costarricenses con presencia en Nicaragua, “son los saqueos y el vandalismo de los que han sido objeto durante más de 20 días. Lo anterior se ha agravado debido a la posición de los comercios de mantener sus puertas abiertas para garantizar el suministro de bienes al pueblo nicaragüense”.
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