LA VOZ DE GOICOECHEA.- La Alcaldesa Municipal Ana Lucia Madrigal Faerron, pagó miles de colones por la publicación en un periódico de 16 páginas a todo color su informe de labores del año 2017 sin estar discutido y aprobado por el Concejo Municipal.
Dos días después de haber empezado la distribución del medio se percata del error y procede a retirarlo de circulación, incluso recogieron los ejemplares ya distribuidos.
Los alcaldes municipales están obligados a rendir cuentas a los vecinos del cantón mediante un informe de labores en la primera quincena de marzo de cada año, ya que así lo exige el artículo 17 inciso g) del Código Municipal. Además, dicho informe debe incluir los resultados de la aplicación de las políticas para la igualdad y la equidad de género.
Los alcaldes municipales están obligados a rendir cuentas a los vecinos del cantón mediante un informe de labores en la primera quincena de marzo de cada año, ya que así lo exige el artículo 17 inciso g) del Código Municipal. Además, dicho informe debe incluir los resultados de la aplicación de las políticas para la igualdad y la equidad de género.
Muchos alcaldes de otros cantones realizan esta rendición de cuentas ante los vecinos organizados en grupos ya sean asociaciones de desarrollo, iglesias, fundaciones, asociación específicas y vecinos en general que tenga a bien participar. Incluso en las administraciones de Carlos Murillo Rodríguez y Oscar Figueroa se realizaban en las comunidades.
Aunque la norma expresa que la rendición de cuentas debe brindarla el alcalde directamente al Concejo, la misma norma refiere que tiene sus efectos ante los vecinos del cantón. La limitante se plantea en el sentido de si un informe de labores presentado al Concejo municipal, para ser discutido y aprobado por los regidores, cumple con una verdadera rendición de cuentas.
Aunque la norma expresa que la rendición de cuentas debe brindarla el alcalde directamente al Concejo, la misma norma refiere que tiene sus efectos ante los vecinos del cantón. La limitante se plantea en el sentido de si un informe de labores presentado al Concejo municipal, para ser discutido y aprobado por los regidores, cumple con una verdadera rendición de cuentas.
La norma por sí misma no garantiza esa legitimidad, aunque podría lograrse de alguna forma con la presencia de una buena representación comunal en la sesión en que se conozca el informe.
El informe presentado por la alcaldesa todavía no lo ha discutido ni aprobado o improbado el Concejo Municipal, está para dictaminar la Comisión de Gobierno y Administración. Además, por lo menos lo publicado en el periódico, no se incluyen los resultados de la aplicación de las políticas para la igualdad y la equidad de género tal como lo exige la norma legal.
El informe presentado por la alcaldesa todavía no lo ha discutido ni aprobado o improbado el Concejo Municipal, está para dictaminar la Comisión de Gobierno y Administración. Además, por lo menos lo publicado en el periódico, no se incluyen los resultados de la aplicación de las políticas para la igualdad y la equidad de género tal como lo exige la norma legal.
REDACCION
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