2017: el año en que explotó la producción pornografía infantil

26 MENORES FUERON VÍCTIMAS DE BANDA QUE USÓ AGENCIA DE MODELAJE PARA EXPLOTARLAS SEXUALMENTE INVESTIGACIÓN TUVO REPERCUSIÓN INTERNACIONAL EN MÉXICO Y BRASIL

LA VOZ DE GOICOECHEA.-     Siempre hubo indicios de que la pornografía infantil afectaba al país. Pero, fue hasta mediados del 2017 cuando se comprobó que una red criminal usaba Costa Rica como centro de operaciones.

Más de 26 niñas fueron filmadas mientras eran explotadas sexualmente en Heredia y San José. Los vídeos se comercializaban en 41 páginas de internet mexicanas y brasileñas.

No obstante, la Sección de Delitos contra la Integridad Física, Trata y Tráfico de personas del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) puso la mira en una agencia de modelaje que era la fachada que usaban 2 sujetos para filmar pornografía.

Esta investigación fue considerada como la mejor del año 2017 en la entidad y recibió un reconocimiento especial por la complejidad que tuvo.

El director del OIJ, Wálter Espinoza dijo que este caso es de los más graves que se han visto en este campo: 2 fotógrafos habrían grabado y violado a más de 26 menores desde el 2009.

Los videos solo podían verse en países de Norteamérica, Europa y Asia, por lo que la investigación fue sumamente complicada por lo que tuvo que recurrir a herramientas tecnológicas para obtener las pruebas”, dijo Espinoza.

Los sospechosos de apellido Solano y Núñez figuran como los presuntos responsables de los delitos de trata de personas con fines de explotación sexual, corrupción de menores y relaciones sexuales con personas menores de edad.

Ellos realizaban casting de modelaje donde elegían a las víctimas y luego las obligaban a mantener relaciones sexuales.

Las menores eran grabadas, mientras los padres esperaban en una sala aparte. Además, las menores eran amenazadas.

“Se hizo un rastreo muy importante en la internet profunda, así como enlaces en Francia, México y Brasil para establecer la existencia de víctimas. Se hicieron muchos esfuerzos hasta establecer que el centro de operaciones era Costa Rica”, explicó Espinoza.

Las autoridades judiciales dijeron comprobaron que los videos eran enviados a México donde operaba un sitio web de pago. Para acceder al material -que no era visible en Costa Rica- los sujetos pagaban entre 500 y 5 mil dólares. La mayoría de pagos se hacían por medio de Bitcoins.

La policía judicial señaló que las menores tenían entre 10 y 15 años de edad. La mayoría eran reclutadas en zonas vulnerables y engañadas con la ilusión de llegar a ser modelos internacionales. La organización incluso colocaba panfletos y banners en alumbrado público.

El caso hizo que también se hicieran detenciones en México y se abrieron casos de investigación en Sudamérica.

El jerarca policial indicó que esta problemática ha ido creciendo a nivel mundial y Costa Rica no ha sido la excepción.



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