LA VOZ DE GOICOECHEA.- El proyecto fiscal denominado Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas gravará con el Impuesto de Valor Agregado muchos bienes y servicios que los costarricenses están acostumbrados a adquirir. Este nuevo texto es muy similar al borrador que se presentó en agosto y según las autoridades de gobierno mantiene prácticamente en su totalidad lo que se quieren gravar.
Costa Rica vive un déficit fiscal que se está haciendo insostenible y el gobierno espera que se aprueben los nuevos impuestos para obtener recursos frescos y hacerle frente a ese faltante económico.
El IVA llegará a sustituir al impuesto de Ventas, con una tasa que se mantendrá en el 13% y no en el 15%, que según el ministerio de Hacienda es la ideal, pero tuvieron que ceder al deseo de los diputados.
La lista de servicios y de bienes en los que se cobraría ese impuesto es amplia:
Actividades: culturales, artísticas, deportivas, científicas, educativas, recreativas, juegos de azar o similares, así como las exposiciones comerciales, incluyendo los servicios de organización de estos.
Eso significa que ir al cine, al teatro, a conciertos, a un partido de futbol o evento deportivo saldría más caro a partir de la aprobación de la ley.
Ir al teatro sería más caro para los costarricenses.
Visitar el dentista o una óptica, visitar a un psicólogo o psiquiatra, así como las consultas con abogados y servicios de arquitectura también se gravarán con el IVA.
Los gimnasios, las clases de baile, llevar el carro a un centro de servicio, las compras por Internet y los casinos también son parte de la lista.
Junto a ellos se gravarían los servicios de streaming como Netflix, que es el más popular en el país, así como otros como HBO Go, así como la descarga de libros por Internet.
Otros bienes y servicios que pagarían el 13% son los alquileres superiores a ¢425 mil mensuales, la electricidad para quienes consuman más de 250 kw/h al mes y transporte, salvo el servicio público.
Tarifa reducida
En el actual proyecto se incluyó un artículo donde se incluye una tarifa reducida del 4% para algunos servicios, entre los que destacan la compra de tiquetes aéreos para viajes nacionales o internacionales, la salud privada y la educación privada en primaria y secundaria.
Quienes paguen los servicios de salud con tarjeta de crédito, se les devolverá el monto del impuesto, salvo quienes paguen cirugías u hospitalizaciones, pues el gobierno afirma que quienes utilizan esos servicios tienen un poder adquisitivo.
Los tiquetes de avión pagarían impuesto.
El 4% además se cobrará en: la compra de empaque y embalaje, así como la materia prima para producirlos. La maquinaria está incluida también.
Se cobrará un 4% en los servicios utilizados en la producción de productos agropecuarios, agroindustriales, acuicultura y pesca no deportiva, de siembra, cosecha, recolección, fumigación, fertilización, control mecánico y químico de malezas.
Las comisiones pagadas a las operadoras de pensiones se incluyeron en este rubro de tarifa reducida.
“El 4% no nos hará sumar mucho en recaudación”, aseveró el Viceministro de Hacienda, Fernando Rodríguez.
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