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Una jornada larga, plagada de estiras y encoges y repleta de recesos estratégicamente planeados culminó en la elección del diputado evangélico Gonzalo Ramírez como nuevo presidente legislativo.

Ramírez, legislador de Renovación Costarricense, logró la victoria gracias al apoyo del Partido Liberación Nacional (PLN). Pero su elección no se decidió ayer, se cocinó desde mediados de abril cuando fue la ficha seleccionada por los verdiblancos. Sus vínculos con Liberación son varios y estrechos: es primo del secretario de esa agrupación, Fernando Zamora. Además, fue Ramírez quien le facilitó a Johnny Araya el partido que le permitió volver a la alcaldía de San José, eso luego de que los liberacionistas lo expulsaran por considerar que los había traicionado al abanadonar la contienda del 2014. Además, Araya y la esposa de Ramírez, Paula Vargas, comparten responsabilidades en la municipalidad josefina, pues ella ocupa la vicealcaldía. Hoy, bajo el ala protectora de Antonio Álvarez Desanti, Araya regresó al PLN como el hijo pródigo y el diputado evangélico es Presidente del Congreso.

La elección de ayer no fue fácil. Los recesos fueron la mejor arma para contener el plan y evitar que se viniera abajo. Finalmente, a las 5:45 p.m., tras largas horas, esta estrategia se materializó. El triunfo supone una victoria para el PLN en vísperas de año electoral. En contraparte, el Partido Acción Ciudadana (PAC), en la persona de Ottón Solís, se quedó corto para captar todo el apoyo del Frente Amplio (FA). Fue derrotado en la tercera ronda de votación con 24 votos frente a 33. 

Un gane reprochado

La victoria de Ramírez -pastor evangélico- fue cuestionada por Edgardo Araya, diputado del Frente Amplio (FA), quien la consideró como una ‘lápida’ a la agenda de los Derechos Humanos, incluidos los planes en pro de las parejas del mismo sexo.

“El PLN mantiene su tesis de trabajar a favor de los derechos humanos y don Gonzalo (Ramírez) será un moderador de debate y existe un compromiso de que la fracción continúe en esta agenda”, comentó Araya.

Y es que Ramírez es recordado por una frase que levantó roncha durante la comparecencia de la entonces procuradora general de la República, Ana Lorena Brenes en 2015: el diputado dio a entender que una mujer casada no debería reunirse con hombres en horarios extraoficina, pues en su caso se “le harían problemas en la casa”.

La derrota de Solís

Ottón Solís, diputado del PAC, admitió que no logró convencer a la mayoría necesaria. CRH/Daniela Abarca

Ottón Solís no quiso cuestionar la victoria de Ramírez. Insistió en que su propuesta era la adecuada para este año legislativo, pero respetó la posición de aquellos diputados que no votaron por él.

Aun así, el diputado del Partido Acción Ciudadana (PAC) consideró que el PLN hizo su juego y extendió lo más que pudo la jornada para lograr acomodar los votos que favorecieran a Ramírez. Toda una estrategia que hasta causó desesperación y molestia en otras fracciones.

“El PLN sabe hacer las cosas, pospuso la votación hasta crear confusión acá y quizás lo logró. Pero las votaciones fueron honestas y la mayoría ganó”, consideró Solís.

Pese a que será un año complicado, con una ventaja de la oposición, Ramírez apostó que este sea productivo.

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